Que pasa morena, que te aflige, que pesan tus entrañas que tanto lamentas.
Que te obliga a perecer siniestra por la noche que no puedes conciliar el sueño de mil noches.
Si te caes parpadeando, al suelo, ya no puedes más. Y el refugio ¿Dónde está?
¿Qué pasa por tu cabeza que esta noche no puedes continuar?
Tus ideas son esclavas de la desesperación que te provoca tu locura de sentir lo que no puedes describir con palabras, pues es una sensación de falta de ganas, de promesas rotas, de tratos incumplidos, de sirenas de terror adornando algunas madrugadas, de malestar psicológico de traumas verbales porque no lo puedes explicar. Entonces quien entenderá.
Si no puedes comprobar más que en tu cabeza el daño que te causa a veces la soledad. Algún remordimiento, alguna pena oculta o silenciosa, alguna agitada y pasada realidad, algún parche en el alma, alguna fría oscuridad...
¿Qué hay en tus labios que no pueden hablar, que hay en tus manos que no pueden tocar, que hay en tus piernas que no pueden llegar?
Amordazar letras y lágrimas es lo mejor que en ciertas ocasiones te sale hacer, pero ... porque no le cuentas aunque sea al Cielo que quieres elevar tu ser, en busca de alguien que te pueda comprender y te ayude a poder ver lo que en silencio ocultas sin querer...
1 comentario:
Pero en què punto daña la soledad? No entendì
Publicar un comentario